LA NOCHE DE ANTES DE LA BODA...

El hall de un hotel. Chek-in en recepción. La llave de la Suite Presidencial y subimos a verla. 140 m2 que se llenarán en unas horas de entradas y salidas, de nervios, de preparativos, de emoción.

Las familias de los novios, ya instalados todos en sus habitaciones y con todo preparado para el gran día, esperan con carita felicidad en el hall para ir juntos a cenar, los novios han elegido reunirles en el restaurante donde cenaron la noche en la que se prometieron, un guiño más a esta especial historia de amor llena de detalles.

El staff de Cuentos ultima preparativos de la decoración y dejamos todo listo para la gran sorpresa. (La novia y Cuentos guardan hasta el día B el secreto acerca de la decoración de la boda, ella ha ido filtrando sólo algún que otro detalle a la familia, pero quiere dejar boquiabiertos a todos con el diseño tan particular que hemos creado...)

Y antes de que se marchen a cenar, la cojo de la mano y me la llevo a hurtadillas para que vea parte del resultado final de la decoración. La llevamos al lugar donde guardamos el material y comenzamos a enseñarle unas cosas y otras... y ella sonríe, solo dice lo mucho que le gusta todo y su cara se llena de ilusión. Y nosotros sonreimos con ella porque comprobamos que la hemos hecho feliz.

Despedida en el hall, las dos familias se marchan a cenar, casi olvidando por los nervios del día de antes de la boda, que en solo unas horas sus hijos estarán diciendo "Sí, Quiero" y escribiendo el primer capítulo de su nueva vida juntos.

Nosotros volvemos al cuartel general de Cuentos, queda aún por hacer en la casa donde construimos Bodas de Cuentos y convertimos los sueños de los novios en Cuentos de Hadas...

Mañana es el gran día. Mañana Patricia y Diego se casan.